Obesidad

La obesidad es una enfermedad prevenible que se caracteriza por un exceso de grasa corporal. La obesidad es diferente del sobrepeso, que se asocia a un peso excesivo. La obesidad se suele diagnosticar cuando el IMC, o índice de masa corporal, de un individuo es igual o superior a 30, mientras que el sobrepeso se suele diagnosticar cuando el IMC es igual o superior a 25 en los adultos. La obesidad y el sobrepeso pueden afectar tanto a niños como a adultos. La obesidad aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardíacas, hipertensión arterial, diabetes, accidentes cerebrovasculares, colesterol alto, síndrome metabólico, trastornos del sueño y ciertos tipos de cáncer. La obesidad también puede disminuir la calidad de vida y puede causar ciertos problemas como depresión, aislamiento social, vergüenza, culpa, etc. El sobrepeso y la obesidad se asocian a más muertes en el mundo que el bajo peso.

Causa

La obesidad está causada por una serie de factores ambientales, genéticos y dietéticos. Los factores genéticos, hormonales, metabólicos y de comportamiento influyen en el peso corporal de un individuo. Sin embargo, la obesidad suele producirse cuando un individuo ingiere más calorías de las que utiliza. Este exceso de calorías se almacena en forma de grasa. Entre los factores de riesgo de la obesidad se encuentran la falta de actividad física, la mala alimentación (seguir una dieta con exceso de calorías, grasas saturadas y trans, y azúcares), los altos niveles de estrés, la falta de sueño, el bajo nivel socioeconómico, ciertas exposiciones a sustancias químicas, los antecedentes familiares de obesidad, el embarazo y los intentos recientes de dejar de fumar.